Había una vez un osito
llamado Pepe. Todos los días salía a pasear con su amigo Juan la chocolatina.
Solo podían salir a pasear
cuando se escondía el sol, porque si no se derretía. Y cuando llovía a Pepe se
le caía el azúcar.
Un día Pepe decidió que
cuando salieran de paseo siempre iban a llevar paraguas. Así Juan se protegería
del sol y Pepe de la lluvia.
FIN
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